La Aldea de Yuste es un lugar que no te dejará indiferente

Elige la Aldea de Yuste para tus vacaciones monoparentales

La Aldea de Yuste, una aventura en la naturaleza mas sorprendente

El destino rural multiaventura ideal para tus vacaciones monoparentales

Si buscas una escapada con tu hijo o hija donde la naturaleza, la historia y la convivencia sean protagonistas, La Aldea de Yuste es el lugar perfecto. Este complejo rural, con más de cinco siglos de historia, te invita a vivir una experiencia diferente, en un entorno natural único, rodeado de campo, aire puro y calma. No esperes un hotel con lujos ni un resort de diseño: aquí se apuesta por lo auténtico, por la sencillez y por el contacto directo con la tierra. Es el destino ideal para quienes quieren compartir tiempo de calidad con sus hijos y también conocer a otras familias monoparentales en un ambiente acogedor y muy especial.

La Aldea ofrece distintas opciones de alojamiento, adaptadas a todas las necesidades. La Casa Rural está ubicada en uno de los puntos más privilegiados de la finca. Dispone de ocho habitaciones independientes con baño privado, algunas con ducha, otras con bañera, y las superiores cuentan incluso con jacuzzi para un plus de relax. Por otro lado, las Cabañas Celtas, de 20 metros cuadrados, ofrecen dos camas individuales, baño completo y chimenea, ideales para quienes buscan una estancia con encanto. Algunas cabañas superiores también tienen jacuzzi. Eso sí, es importante saber que no se incluyen perchas, toallas ni productos de baño, por lo que conviene llevar lo necesario en la maleta.

En cuanto a las instalaciones comunes, la oferta es amplia y muy variada. Hay cuatro albergues rurales, veintiuna cabañas, una casa rural, dos salas de reuniones con capacidad para 130 y 30 personas, una bodega del siglo XV que se convierte en un animado espacio para fiestas nocturnas, y varios comedores: el principal con capacidad para 140 personas, un restaurante llamado La Capilla para 120 comensales y un comedor de verano al aire libre con espacio para 200. Además, el complejo cuenta con piscina de 25 metros, dos lagunas naturales perfectas para la práctica de piragüismo, tres circuitos para vehículos 4x4, dos campos de paintball, una pista de aterrizaje para ultraligeros, campo de fútbol, cancha de vóley y hasta una plaza para capeas. También hay sala de talleres y juegos, enfermería y zonas para actividades en grupo. Las mascotas están permitidas con un coste adicional, siempre bajo petición y con supervisión. Ten en cuenta que en la finca viven algunos perros en libertad, ya que forman parte del entorno natural, y la organización no se hace responsable de ningún incidente.

La propuesta gastronómica es sencilla pero casera, con platos elaborados como si estuvieras en casa de una buena cocinera de pueblo. No es un bufé ni un restaurante a la carta, sino un menú cerrado con productos locales, frescos y de temporada. El desayuno incluye café, leche, infusiones, galletas, bizcochos, tostadas con mantequilla y mermelada. Las comidas y cenas consisten en un primero, un segundo plato, postre y bebida (vino, agua o gaseosa). Los horarios son muy concretos: desayuno a las 9:30 h, comida a las 14:00 h y cena a las 21:30 h. En el caso de llegar el primer día con cena incluida, el comedor permanece abierto hasta las 23:00 h.

Uno de los grandes valores de La Aldea de Yuste es su paraje natural. Aquí, el campo se mantiene como finca tradicional, desbrozando solo las zonas necesarias para que puedas caminar y disfrutar del paisaje sin alterar el entorno. No encontrarás jardines artificiales ni instalaciones de lujo, porque el alma de este lugar está en su autenticidad. Las actividades, de aventura y entretenimiento, están pensadas para todos los públicos, sin carácter competitivo, y favorecen la convivencia y la participación. Te sentirás como en un campamento de verano en familia, donde conocerás a otras madres, padres e hijos con los que compartir experiencias, juegos y risas. Aquí el contacto humano es parte esencial del viaje, tanto para adultos como para niños. La Aldea de Yuste no es un destino para cualquiera, pero sí lo es para quien aprecia la sencillez, la vida al aire libre, el calor humano y la desconexión real. Es importante saber dónde vas antes de reservar: si valoras el campo, la convivencia, el respeto por el entorno y las experiencias compartidas, este será tu lugar. Pero si prefieres el confort de un hotel con servicios personalizados y jardín cuidado, quizá este no sea tu estilo. Nuestro equipo está siempre dispuesto a resolver cualquier duda y ayudarte a preparar tu estancia. Queremos que quienes nos visitan disfruten, repitan y se lleven un recuerdo inolvidable.